Cuentas bancarias


¿Qué son las cuentas bancarias?

Como ya sabéis, las cuentas bancarias son el producto financiero más común en cualquier hogar familiar. Estamos habituados a escuchar hablar de las cuentas bancarias en nuestra casa desde pequeños, por lo que la mayoría de nosotros ya estamos familiarizados con su mecánica y gestión.

El principal cometido de este producto es el de gestionar nuestro dinero. A través de las cuentas bancarias los usuarios tenemos un contacto directo con nuestro banco.

La cuenta bancaria es un producto financiero por medio del cual el o los titulares de dicho contrato pueden administrar su dinero, a través de las diferentes formas qué ofrece la entidad.

Por lo general, al tener una cuenta bancaria, podrás ingresar tus fondos en el banco, para luego realizar otras acciones, tales como: transferencias, pago de recibos, retiros de dinero por medio de cajero automático, pagos mediante tarjeta de crédito, entre otros.

Es muy importante tener en cuenta que todos los movimientos realizados tanto de ingreso como de salida de fondos quedarán registrados en la cuenta bancaria.

A las cuentas bancarias se las considera como un producto financiero básico, del cual se pueden generar subproductos o productos tales como los préstamos o las tarjetas débito.


Tipos de cuentas bancarias

Dependiendo de las funciones que quieras realizar en tu banco y de la finalidad con la que deposites tu dinero, los diferentes tipos de cuentas bancarias pueden variar mucho de una a otra.

En efecto, actualmente las cuentas bancarias más utilizadas son la cuenta corriente, la cuenta nómina y la cuenta remunerada, pero también existen algunas otras que poseen características específicas y que responden a exigencias precisas por parte de los clientes.

En el mercado podemos encontrarnos con las siguientes cuentas bancarias:

Cuentas corrientes

La cuenta corriente es, sin duda, uno de los productos estrellas de los bancos y a partir de la cuál los clientes pueden administrar su dinero de una forma fácil y organizada.

Las cuentas corrientes funcionan de una manera bastante simple. A través de depósitos a la vista podrás disponer de tu dinero en todo momento y realizar gestiones como transferencias, ingresos, pagos, etc.

Es importante que sepas que la cuenta corriente, al contrario de una cuenta de ahorro, te permite gestionar tu dinero diariamente, razón por la que este tipo de cuentas no ofrecen ningún tipo de remuneración por el dinero que se mantenga en ellas.

Las cuentas corrientes son las cuentas más habituales entre cliente y banco. A través de este tipo de cuentas realizaremos las acciones más cotidianas como puede ser la domiciliación de pagos, la realización de cobros, etc.

A diferencia de otras cuentas, las cuentas corrientes no ofrecen remuneración alguna a sus clientes y su contratación suele incluir comisiones por mantenimiento o administración entre otras. Además te permiten la posibilidad de disponer de una tarjeta de crédito o débito.

Son cuentas sencillas, muy útiles para las operaciones más rutinarias. Sin embargo, no son las más idóneas si estás buscando ahorrar cada mes.

Una Cuenta Corriente es un producto financiero que te permite manejar tu efectivo de manera amena,de uso fácil, sencillo, seguro y a su vez, sirve para disponer del dinero en efectivo cuando lo requiramos. La cuenta corriente se puede interpretar también, como un deposito, ya que disponemos de el en el instante que lo necesitamos o queremos disponer de el.

Es el tipo de cuenta bancaria más habitual que se puede encontrar en un banco. En este tipo de cuenta se puede disponer del dinero siempre que se desee y realizar gestiones tales como: transferencias, ingresos, pagos, entre otros.

A diferencia de otro tipo de cuentas, esta no está orientada al ahorro, sino que está pensada para gestionar el dinero diariamente, por este motivo, no ofrece ningún tipo de rentabilidad por el dinero que se tiene guardado en ella

Generalmente se encuentra sujeta a algún tipo de comisión de mantenimiento o a las operaciones realizadas. Puede ser cancelada en cualquier oportunidad, sin ser penalizado, y avisando a la entidad bancaria previamente.

Características Cuenta Corriente:

  • Una cuenta corriente se caracteriza porque podemos administrar el dinero por diferentes medios de pago, como los cheques o principalmente, las tarjetas débito. De esta forma, es factible recibir el dinero con la opción de nuestra preferencia.
  • Al disponer de una cuenta corriente, podemos acceder a un cupo de sobregiro, es decir, que la entidad financiera en la cual dispongamos de nuestra cuenta corriente, nos habilitara esta opción, para usarlo en el momento que mas estemos sin blanca.
  • La cuenta corriente es una de las maneras mas versátiles y menos selectiva, y que esta puede ser obtenida tanto por personas naturales como jurídicas, pues con el uso de los cheques y tarjetas débito, se evita cargar con grandes sumas de dinero.
  • Con el dinero que dispongamos en la cuenta, podremos acceder a diferentes bienes o servicios y adquirirlos de manera automática, por medio de una tarjeta o cheque.

Cuentas de ahorro

Conocida por la gran mayoría de nosotros, la cuenta de ahorros te permite generar intereses sobre los fondos para utilizarlos a futuro.

Es importante que sepas que las cuentas de ahorro variarán dependiendo de los cargos mensuales que se apliquen por servicio, de la tasa de interés y del depósito inicial mínimo.

Este tipo de cuentas son ideales para aquellos que puedan y deseen destinar una parte de sus ingresos al ahorro, generando así intereses que incrementarán los fondos iniciales.

Son cuentas destinadas, como su propio nombre indica, al ahorro ya que ofrecen cierta rentabilidad.

Además de destacar por su liquidez, ya que con este tipo de cuentas podremos disponer de nuestro dinero en el momento que queramos, las cuentas remuneradas son una opción segura en situaciones de inestabilidad económica. Su cancelación no lleva asociada costes de penalización.

Actualmente, algunas cuentas remuneradas permiten la posibilidad de contratar ciertos productos de ahorro.

Es un producto financiero que le permite al cliente ahorrar su dinero de forma segura. La cuenta de ahorros es considerado el producto más usado para ahorrar y disponer del dinero de forma rápida.

El dinero depositado en la cuenta, generará intereses de acuerdo a las políticas del banco y a las características particulares de cada producto.

Permite revisar los detalles de las tasas, para conocer cuál es el interés generado por la cuenta en cualquier momento. Además permite disponer del dinero de forma ágil y rápida, puesto que cuando abres tu cuenta, el banco entrega generalmente una tarjeta de débito asociada a esa cuenta, por medio de la cual es posible realizar retiros en la red de cajeros automáticos del banco.

Entonces para resumir el funcionamiento de una cuenta de ahorros, se puede depositar dinero en esta a través de consignaciones por medio de los diferentes canales: oficinas, cajeros y banca virtual, el dinero que se tiene en la cuenta genera intereses de acuerdo a las políticas del producto y el banco y permite retirar el dinero de esta en cualquier momento a través de la tarjeta de débito asignada.

Beneficios de las Cuentas de Ahorro:

  • De forma general, la suma de la apertura no son altos, por lo que es sencillo disponer de un productos de fácil acceso y elegir una cuenta que se adapte a nuestros requerimientos.
  • Facilidad de controlar los movimientos financieros, ya sea desde la aplicación, el portal web (desde un computador con conexión a Internet), o en los puntos disponibles de cajeros automáticos.
  • Habilitada la opción de realizar transferencias a cuentas de otros bancos ajenos al nuestro.
  • Posibilidad de obtener rentabilidad por la suma que tengamos disponible en nuestra cuenta.
  • No es igual que una cuenta corriente, existen diversas diferencias entres estas cuentas, siendo la mas destacada que la cuenta corriente funciona tanto con tarjeta débito como con chequera.

Cuentas remuneradas

La cuenta remunerada es un tipo de cuenta de ahorro destinada a aquellas personas que no desean ser penalizadas en caso de querer disponer de los fondos de la misma antes de los plazos estipulados.

Generalmente, este tipo de cuentas ofrece rentabilidades superiores a las de una cuenta corriente tradicional e inferiores a la de un depósito a plazo fijo.

Es importante recordar que al tener una cuenta remunerada, podrás disponer de tus fondos a cualquier momento sin ningún tipo de penalización.

A su vez, no hay que olvidar que, a diferencia de una cuenta corriente, las operaciones que puedas realizar con ellas son bastante más restrictivas y no podrás, por ejemplo, hacer uso de ciertas tarjetas de crédito o domiciliar los ingresos.

Cuentas nómina

La cuenta nómina es un tipo de cuenta orientada a aquellos clientes que deseen domiciliar su nómina en el propio banco.

Aunque su funcionamiento es muy similar al de las cuentas corrientes, este tipo de cuentas posee algunas ventajas que es necesario mencionar.

Entre ellas, las más importantes son que la entidad bancaria en donde hayas obtenido tu cuenta nómina no te cobrará algunas de las comisiones habituales, como el mantenimiento de la misma o los gastos de administración.

Además, en algunas ocasiones el banco te puede ofrecer una cierta remuneración por los ahorros o te puede proponer algún tipo de regalo por la contratación de la cuenta.

Para contratar una cuenta nómina, es completamente indispensable que domicilies tu nómina mensual, en caso contrario no podrás abrir este tipo de cuenta.

Las cuentas nómina pueden considerarse como una modalidad dentro de las cuentas corrientes, ya que su operativa es muy similar, pero ofrecen  una serie de ventajas por la domiciliación de la nómina (regalos, devolución de un porcentaje sobre los recibos domiciliados…).

Aunque pueden llevar asociadas comisiones, normalmente no es lo  habitual. También puede darse el caso de que nos ofrezcan alguna remuneración, pero siempre será inferior a la que ofrecen las cuentas remuneradas.

La cuenta nómina, como su nombre lo indica, es una cuenta bancaria en la cual el trabajador asalariado recibe su sueldo, y también aplica para aquellas personas que reciben su pensión u otro tipo de subsidio regular.

Generalmente este tipo de cuentas se encuentran exentas de comisiones de administración y mantenimiento, y en muchos casos no se exige un compromiso de permanencia.

Características de la Cuenta de Nómina:

  • Se puede adquirir sin necesidad de ir a una oficina, invirtiendo un tiempo aproximado de 5 minutos.
  • Fácil adquisición de la primera tarjeta débito de forma totalmente gratuita, con la cual, podemos acceder a nuestra cuenta de forma remota por los diferentes canales.
  • Efectuar operaciones financieras sin ningún costo y sin importar el lugar donde estemos.

Cuentas de valores

Si lo que pretendemos es invertir, este tipo de cuenta es la que más nos conviene.

Son similares a las cuentas corrientes pero van a servirnos para depositar títulos (acciones, bonos…). A menudo están asociadas a una cuenta corriente y permiten que realicemos operaciones como compras, ventas, cobro de dividendos, custodia de títulos y similares.

Cuentas bancarias para empresas y negocios

Orientadas claramente a empresas, al igual que las cuentas para particulares también pueden ser de ahorro, cuentas corrientes, remuneradas,  etc.

Otros tipos de cuentas bancarias

Además de las cuentas tradicionales, las entidades bancarias proponen una serie de cuentas más especializadas y orientadas a satisfacer las necesidades específicas de sus clientes.

En este sentido, algunas de las cuentas que existen son:

  • Cuentas bancarias para niños
  • Cuentas bancarias para jóvenes
  • Cuentas para comunidades de vecinos
  • Cuentas de mercado monetario
  • Cuentas en divisas
  • Cuenta de jubilación individual, etc.

¿Qué necesitas para abrir una cuenta bancaria?

Para abrir una cuenta bancaria solo debemos acudir a nuestra entidad financiera y entregar una determinada cantidad de dinero, la cual constituirá nuestro primer depósito. También se firmará un contrato (la entidad debe entregarnos una copia).

Además, en el caso de las cuentas corrientes, la entidad entrega un talonario que permite disponer de los fondos, mientras que en las cuentas de ahorro se entrega una libreta. En el momento de la firma del contrato se rellena también la ficha de firmas. En ella se recogen las firmas de las personas  que cuentan con autorización para disponer de los fondos.

Para abrir una cuenta corriente tenemos que ser mayor de edad. El representante legal de una cuenta es quien actúa en nombre del titular.

En caso de que una persona esté incapacitada judicialmente o concursada va a sufrir ciertas tiene restricciones a la hora de poder abrir cuentas bancarias. Para poder abrirlas deberá establecerse un representante legal.

Si se trata de personas jurídicas, la apertura de una cuenta bancaria debe ir acompañada con la designación de las personas a las que se conceden los poderes para efectuar operaciones vinculadas a dichas cuentas.


¿Qué es el código de cuenta cliente?

Todas las cuentas bancarias se identifican a través de un código de uso universal que se compone de 20 dígitos:

  • 1111 2222 33 44 55555555

1111: Son 4 dígitos que se utilizan para identificar a la entidad.

2222: Son 4 dígitos que hacen referencia a la oficina en la que está abierta la cuenta.

33: Son 2 dígitos de control. El primero de ellos se calcula a partir del 1111 y 2222. El segundo se obtiene a partir de 55555555.

44: Son 2 dígitos que representan el tipo de cuenta.

55555555: 5 dígitos correspondientes al número de cuenta.

Hoy en día, con la adopción del SEPA, se utiliza el IBAN.


¿En qué operaciones es obligatorio presentar el NIF?

Cuando vamos a llevar a cabo una operación es obligatorio presentar el NIF a la entidad de crédito. Para abrir una cuenta tenemos que presentar nuestro NIF en ese mismo instante, o como a más tardar, en el plazo de un mes a partir del siguiente día hábil.

Si tras este mes no hemos presentado nuestro NIF, la entidad suspenderá las operaciones sobre dicha cuenta.

Las entidades tampoco podrán liberar cheques contra entrega de efectivo, bienes, valores  u otros cheques sin la comunicación previa del NIF del tomador, con excepción de los cheques librados contra una cuenta bancaria.

Es obligatorio que las entidades exijan el NIF a quienes quieran cobrar cheques emitidos por otras entidad de crédito cuando el abono no se realice en una cuenta bancaria o en el caso de que los cheques sean de un valor superior a los 3.005,06 € si los pretende cobrar una persona distinta al librador.


Tipos de saldo que se pueden dar en las cuentas corrientes

En cuanto al tipo de saldo debemos diferenciar, por un lado, entre:

Saldo total o contable: Es el total de fondos que hay en la cuenta.

Saldo disponible: Es la parte del saldo total que tiene disponibilidad inmediata.

Saldo retenido: Es la parte del saldo total que por algún motivo no está disponible.

Y por otro lado podemos distinguir entre:

Saldo acreedor: Refleja el importe que el cliente tiene depositados en la entidad bancaria.

Saldo deudor: Indica que el cliente ha dispuesto de un importe superior al previamente ingresado. Esta situación, que coloquialmente se conoce como estar en números rojos, requiere la aprobación de la oficina bancaria en la que está abierta esa cuenta.

Se debe corregir lo antes posible, si no queremos que nos cobren un elevado interés por descubierto.